Título original: Jazireh ahanir
Dirección y Guión: Mohammad Rasoulof
Intérpretes: Ali Nassirian, Hossein Farzi-Zadeh, Neda Pakdaman, Nemat
Fotografía: Reza Jalali
Montaje: Bahram Dehghani
Música: Mohammad Reza Aligholi
Nacionalidad: Irán. 2005
Duración: 90 minutos
Premio Especial del Jurado. Festival de Gijón 2005
Hay instantes de una belleza que se diría coreografiada y sin embargo, en cada intersticio del celuloide que sostiene esta “Isla de hierro” rezuma verosimilitud y verdad. Entre las influencias que forjan la personalidad de su realizador, MohammadRasoulof, la de Abbas Kiarostami puede resultar la más evidente pero podríamos citar al primer Zhang Yimou o al Chen Kaige de “Tierra Amarilla” para encontrar parecido entusiasmo y hálito lírico al que atraviesa esta película.
“Iron Island” recoge su título de un enorme barco en el que, dirigidos por la mano de hierro en guante de terciopelo de su capitán, se vive como si de una ciudad se tratara en espera de esa tierra prometida que algún día habrá de llegar.
En ese microcosmos, el espectador asiste a un ceremonial casi sociológico donde se recogen las diferentes actividades de la sociedad que la conforma. El trabajo, las relaciones de amistad y amor, las ceremonias rituales y el aislamiento de esa isla dan a Rasoulof la posibilidad de tejer una hermosa e impactante película.
A medio camino entre el testimonio documental y la reconstrucción antropológica, “Iron Island” se llena de ecos atemporales en los que reverberan los sueños y las necesidades de la gente sencilla. Su realizador y guionista teje un fresco impactante capaz de fundir en el mismo plano-secuencia el gesto de humor con la descarga de violencia ciega. El resultado se antoja como una película singular, llena de vitalidad y tocada por la tragedia de la condición humana. |